Historia de un viaje
El malestar comenzó desde que la orden de trabajo se asignó, salida a la ciudad de México en punto de las 12:00 horas del sábado 10 de junio en la calle de doctor Hierro, con la instrucción de dar cobertura al día del zacatecano en la tercera sección del Bosque de Chapultepec.Nada ni nadie podía evitarlo, adiós al fin de semana en el hogar y disfrutar el primer partido del TRI. No cabe duda, nadie traza su propio destino.
La hora y el momento llegó, nos presentaron el vehículo donde 11 personas realizaríamos el viaje de 8 horas, con una posible escala para comer, como mejor pudimos nos acomodamos, la verdad es que la van resultó sumamente incomoda para un viaje tan largo.
Risas, algunas bromas y demás, en la primer hora de viaje, pronto el aburrimiento hizo presa fácil de quienes vimos como la carretera se extendía bajo el auto.
La primera parada fue placentera, una hamburguesa y un refresco ayudaron a mitigar el hambre hasta la hora de la cena.
Entonces comenzó el suplicio, dos horas antes de llegar a la ciudad de México, un celular sonó de forma constante un tal Alejandro Sánchez que dicen trabaja en el IMSS en el área de comunicación social, se desconoce si trabaja, insistía en conocer la hora de llega de la comitiva de prensa zacatecana.
El teléfono en cuestión era de su pareja y representante de Comunicación Social de gobierno del Estado, Blanca Estela Ibarra quien al grito de mi "amooooooooooooor" respondía una y otra vez las llamadas.
Las llamadas llegaron al punto de lo ridículo, cada 30 minutos el teléfono repiqueteaba y mi "amoooooooooor" aburría a los presentes.
Esta parte parecía lógica, indicaba que el interés de Alejandro era dar un buen servicio, primer error de calculo. En fin, el galán dio indicaciones de llegar al teatro Hidalgo del IMSS ubicado a espaldas del Palacio de Bellas Artes.
Pero como otros tantos, el señor se equivocó y trató de justificarse o escudarse en un servidor que, oriundo de la capital del país, medianamente conoce algunas calles de la capital.
Este equivoco, nos obligó a regresar hasta la Torre Mayor donde "Alejandroooooo" esperaba impaciente a su Julieta, segundo error.
Como de todos en el DF saben, este sujeto fue la excepción que hace la regla, está prohibido estacionarse, más aún en un vehículo oficial de gobierno del Estado de Zacatecas, en los carriles centrales de la avenida más importante de la capital, Paseo de la Reforma.
No obstante, Balquita y su galán decidieron tener un encuentro romántico sobre la avenida, sin importar la falta vial que cometían. Después de varios besos y abrazos nos hicieron el honor de abordar el vehículo, en cual 10 de los 11 pasajeros teníamos el deseo de llegar a un lugar donde descansar.
Ahora sigue el tercer error, "Alejandroooooo" (léase con mucho amor y miel derramada) dispuso que nos hospedaríamos en el hotel del Sindicato Nacional del Seguro Social en la colonia Condesa.
El error consistió que el gobierno del Estado requiere facturar sus gastos y justificarlos y, él apuesto galán nunca consideró que al no ser una empresa privada no expedía factura, aun y cuando juró y perjuró que si lo hacían.
Con tristeza dirigimos nuestros pasos a otro hotel que, presumo, nuestro guía conocía muy bien, el hotel Roosvelt. Sin embargo para ubicarlo requirió utilizar más de una ocasión el teléfono celular de su amada, que su servidor hay que decirlo también utilizó repetidas veces para llamara a Zacatecas y conocer el estado de salud de los niños que dejó enfermos en el terruño (no es justificación, el dato es meramente informativo).
Tras recorrer varias calles de la colonia Condesa y varias llamadas después llegamos al hotel, nos instalamos, sin contratiempo, la hora de salir a cenar a llegó.
Alguien propuso ir un restaurante de comida cubana cuyo nombre olvide, sin embargo el siempre dispuesto galán "Alejandroooooooo" tenía la solución bajo la manga, sin importar opinión alguna encaminó nuestros pasos a la Bodeguita del Medio o algo así.
Ahí deguste unos cuantos mojitos, un buen puro Cohiba, una cena tranquila y un poco de música cubana, todo esto claro en compañía de la enamorada pareja que más tarde invitó a tres damas que, cabe decirlo, no eran parte de ningún medio de comunicación.
Estas damas y el galán se vieron, también, beneficiados del erario del gobierno del Estado y no sólo cenaron, bebieron y bailaron con recursos destinados para una gira de gobierno, gozaron además de una noche de hotel.
Algunos detalles tengo de tan romántica velada, mismos que omitiré por no poder asegurar de ciertos, no obstante tengo la certeza que "Alejandrooooooo" y Blanca Estela pasaron romántica velada a costillas del erario zacatecano.
Esto lo se por diversas pláticas que sostuvo la representante de Comunicación Social con sus compañeros de juerga a lo largo del día, no así con sus compañeros de oficina que eran tres y se abstuvieron de cualquier diversión durante el viaje, además de padecer el mismo dolor que su servidor, "Alejandroooooooooo".
El suplicio no terminó en la noche, como era de suponerse, a la hora del desayuno la romántica pareja determinó la hora de levantarse y que comer, quien esto escribe recibió tres llamadas en su habitación con sugerencias para desayunar, ninguna fue de mi agrado.
Finalmente baje al restaurante del hotel y pedí unos chilaquiles verdes, mismos que nunca llegaron, el mesero no entendió la orden y sirvió el mismo plato pero con salsa roja.
Al cabo de varios minutos, "Alejandroooooo" decidió que era hora de pedir la cuenta, tras consultar si nadie quería algo más. En este momento me resultó extraño que el buen galán tuviera en sus manos, el sobre donde se guardaba el presupuesto designado a la gira de trabajo y a los gastos de quienes representamos algún medio de comunicación en Zacatecas.
Más extraño me resultó que las tres mujeres, que llegaron a cenar la noche anterior, estuvieran presentes para desayunar. A estas alturas me pregunté también por qué Alejandro estaba degustando, nuevamente, el pan y la sal con el grupo.
El reloj marcó las 09:30 horas y el traslado al acto oficial, durante 6 horas fui relativamente feliz hasta que descubrí que me habían volado la cartera, me lamenté en ese momento, más habría de lamentarlo algunas horas más tarde.
El acto terminó, la gobernadora se fue alrededor de las 16:00 horas, su servidor harto del ruido, cansado y con dos notas por redactar tenía la firme intención de abordar el vehículo y que este tomara con rumbo a Queretaro. Las notas serían redactadas en el transcurso de dos horas de camino.
Pero no, mis esperanzas se vieron frustradas gracias a la enamorada pareja, el sujeto en cuestión (en este momento mi amabilidad llegó al límite) dispuso que nos llevaría a un Cibercafé para redactar, yo advertí que requería al menos dos horas para redactar mis notas, nadie me creyó.
Una vez en el ciber, comencé mi trabajo, Blanca y compañía, cuales buitres que vuelan por encima de su comida, rondaron a unos metros de su servidor quien mantenía una dura lucha con el teclado para sacar algún texto que pudiera interesar a los lectores. Pero la presión fue demasiada.
En este momento, cruzó por mi mente la genial idea de abandonar la comitiva y regresar en camión a Zacatecas, entonces maldije el no tener mi cartera en el bolso trasero, comprendí que mis lazos eran más fuertes de lo deseado con la comitiva, Blanca y el sujeto.
Mi desesperación fue total cuando descubrí que, en lugar de acercarnos a la salida de la ciudad con rumbo a Queretaro para comer-cenar, nos enfilamos hacia la Diana Cazadora a unos de los restaurantes que menos me agradan Lynny’s, donde es lo mismo que ir a Vip’s. Ni modo, el que conoce a Dios donde quiera se anda incando.
De mal humor, cansado y soportando, me vi obligado a comer una pechuga a la parrilla, guarnición de verduras congeladas, guacamole y chiles verdes toreados. Tristemente la comida como en todo buen restaurante de este tipo, sabía a cartón corrugado. Más bueno y barato hubieran sido unos tacos de carnitas, pero el sujeto tenía su propio plan y claro como todo era pagado por gobierno del Estado, a quien le dan pan que llore.
Pero no hay plazo que no se cumpla ni fecha (en este caso hora) que no se llegue, la despedida, para mi placentera, triste para Blanca llegó, el sujeto por fin desapareció de mi vida y la comitiva tomó camino a Zacatecas.
Del regreso hay poco que contar, la noche nos envolvió llegando a San Luis Potosí y la madrugada se hizo presente a las 03:00 horas cuando por fin vi las luces del hogar. Cabe mencionar que Blanca y su servidor terminaron con el habla retirada, no he dormido desde entonces, por el mal trato y su falta de profesionalismo.
Debo reconocer que tres cosas buenas dejo el viaje:
Me logre comunicar con una amiga muy querida que por unos minutos me hizo olvidar del sujeto, su amada y la distancia con el terruño.
La hora en que el sujeto dejó de tomar decisiones que no le importaban
El momento que llegue al hogar y me recibió mi esposa para dormir en sus brazos.
Pido disculpas si el texto es largo y por una última reflexión.
Es triste ver que un área donde siempre, su titular Silvia Montes, ha demostrado profesionalismo al brindar, a quienes estamos obligados a cubrir giras tan duras, las mejores condiciones de trabajo, se vean opacadas por gente carente de toda sentido común y responsabilidad por dejar en manos de terceros la toma de decisiones que afectan no sólo la imagen de un departamento de Comunicación Social sino de un gobierno.
Estas acciones hacen suponer que este tipo de dispendios y excesos se permiten en todas las áreas, sin embargo me permito señalar que, en este caso Blanca Estela Ibarra, una sola persona no significa que esta actitud asuma todo el personal de Comunicación Social, pues el resto de la comitiva oficial demostró madurez, responsabilidad y profesionalismo a lo largo del viaje.
Gracias y buenas noches.
2 Comments:
jueves, junio 22, 2006
La musica de sones que tanto se parece
Ya hace algun tiempo tomamos la ocho vías, carretera enigmàtica de la Cuba agreste, inhospota de comerciales y escenas del mundo que vivimos de los Levi's, Enjoy Coke, la vida de la M amarilla y todo lo que como vecinos distantes sabemos existe.
En ese camino, las tonadas de la vida ruda, con persoans que no ciudadanos permanecen y subyacen sus cuerpos como en un encierro revolucionario. Isla vuelta Carcel. Y en eso, el ser presidiario en tu tierra misma tiene un sabor. Salsa y Sones que incluso han evocado a un Hemingway delirante.
Ritmos que una vez baile con esa mujer de Lilinore. Los recuerdo ahora porque son ritmos tan zigzagueantes que volcaron mi corazón y el sexo masculino disfrutaba.
El punto de todo esto es para darle tributo a Aute porque en él se descubre una noche y los teclazos de un post se reproducen.
En el Caribe
se vive como se escribe,
se escribe como se vive,
en el Caribe.
Bajo la noche guajira
Hemingway delira.
El hecho es que las tonadas del sonar cubano nos acercan a historias que por lo regular al ser dramáticas y cabronas, muchos recurrimos para releerlas.
la luna, bola de sangre,
la devoró el tiburón,
las olas vuelan tiñosas
rizadas por un ciclón,
"Pilar" navega sin rumbo
bajo un diluvio de ron...
A veces lo màs incierto, lo que nos causa temor es lo que disfrutamos mas, porque en la busqueda de doblegar esa estupida sensación, logramos vencer al payaso que, en mi caso, causò extrañeza y terror; luego el payaso tras verlo como se ridiculiza, le terminamos haciendo mofa para siempre.
Hola Saúl.
No me había dado tiempo de leer tu blog últimamente; chequé lo de la inmediatez y me remontó a las peleas que tuve con Juancho por el tema, jajaja.
Lo que no tiene perdón de Dios es lo de tu gira por el DF pagada por el goberno estatal; chale, por eso estamos como estamos, por gente así que trabaja con tu amiga la Lenteja.
Un abrazo y saludos a tu familia.
JML
Post a Comment
<< Home